Si eres un profesional de la formación en una organización quizás te hayas preguntado:

• ¿Cómo puedo aprovechar el conocimiento interno para garantizar una transferencia coherente y precisa a los nuevos empleados?

• ¿Cómo puedo ofrecer cursos relevantes a los usuarios basados en su experiencia e intereses?

• ¿Cómo puedo sacar partido a la información y datos que se generan desde las comunidades internas de aprendizaje?

Una plataforma de aprendizaje social (también llamada LXP) puede ayudar a reducir costes de formación sustituyendo el aprendizaje formal de terceros por contenido creado por tus propios empleados. Ofrece un espacio para debates, grupos privados o públicos, y la capacidad de colaborar con compañeros.

Combinar un LMS junto con un LXP te ayuda a centrarte en contenidos más especializados evitando duplicar materiales que ya hayan sido creados internamente. En esta guía te mostramos seis beneficios de integrar lo mejor de ambos mundos.

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